Proyectos de cooperación

Haití es uno de los países del mundo más expuestos a los desastres naturales y su vulnerabilidad ha aumentado debido al cambio climático, la degradación del medio ambiente y el uso insostenible del espacio, factores todos ellos que impactan directamente sobre la seguridad alimentaria de las poblaciones que dependen de la agricultura para su subsistencia tanto como fuente de ingresos como de alimento. El país vive desde febrero 2019 en una grave crisis social y política que tiene paralizado al país, a lo que le siguió el impacto por la prolongación de la estación seca por el fenómeno del niño en 2020 y la crisis actual en el marco de la COVID-19. Esto hace que haya cada vez mayores dificultades para una población de por sí vulnerable para acceder a las necesidades vitales de comida, agua y servicios de salud. En la zona de intervención un 43% de la población se encuentra en fase de crisis alimentaria aguda, es decir no son capaces de cubrir las necesidades mínimas de alimentación. Por ello, el objetivo del proyecto es proporcionar ayuda alimentaria a 50 hogares (300 personas, 100% mujeres y niñas) en situación de inseguridad alimentaria aguda (fase de crisis-urgencia) y prevención en COVID-19.