Descripción resumida
El proyecto se desarrolla en la provincia Amazónica del Ecuador, donde conviven dos riquezas
incompatibles entre sí: por un lado el oro negro (petróleo extraído del centro de la selva) con la gran
problemática ambiental y social que conlleva y por otro el oro verde (una riqueza natural inigualable con la
Presencia de Parque Nacional Yasuní considerado como un santuario mundial de biodiversidad y
reconocido por la Unesco como Reserva de Biosfera en 1999). Contiene además una gran riqueza humana
con varias nacionalidades indígenas, algunas todavía sin contacto (Pueblos en Aislamiento Voluntario
PIAV) y otros de recién contacto (Waoranis).
Si bien por sus riquezas debería ser un provincia desarrollada, Orellana presenta niveles de pobreza (NBI
Necesidades básicas Insatisfechas) de los más altos del país. Esto es debido a que la los réditos económicos
del petróleo salen de la provincia siendo muy poca la inversión devuelta por parte del Estado. Esto conlleva
a que la situación, principalmente de la población rural de la provincia, sea muy precaria, más aún cuando
hablamos de los pueblos indígenas que la habitan, y más todavía cuando nos referimos a la situación de las
mujeres y su estado de desigualdad.
La Fundación Alejandro Labaka (FAL), se creó en el año 2003 buscando defender los derechos culturales y
sociales, principalmente de los pueblos indígenas asentados con la provincia. La FAL se identificó con el
nombre del obispo español que en 1987 fue lanceado por los PIAV cuando ingresó a su territorio con la
intención de interceder por ellos para que no fueran exterminados como consecuencia del auge petrolero que se introducía en la selva arrasando con todo árbol, animal o incluso grupo humano que se interpusiera
en su camino. Desde sus inicios la FAL ha venido trabajando con hombres, mujeres y jóvenes de las
diferentes nacionalidades (kichwas, shuars y waoranis), pero en especial de estos últimos, quienes son los
más vulnerables por su reciente contacto (apenas desde 1970), a través de un acompañamiento cercano,
tratando de fortalecer y empoderar sus capacidades para enfrentar la sociedad en la que nos encontramos.
El Museo Arqueológico y Centro Cultural de Orellana, MACCO - EP, abrió sus puertas el 30 de abril de
2015, como resultado de un trabajo conjunto entre la Misión Capuchina de Aguarico, (quien desde los años
70 inició un rescate del patrimonio arqueológico de los pueblos amazónicos) y el Gobierno Municipal. Hoy
en día el MACCO-EP representa el museo amazónico más importante del país y abre sus puertas, en
coordinación con la FAL, al trabajo con mujeres indígenas, en una recuperación de sus saberes ancestrales.
El proyecto plantea promover mayor autonomía y empoderamiento de 2 asociaciones de mujeres indígenas;
una kichwa y una waorani, ya conformadas, pero que no han logrado fortalecerse lo suficiente para que su
accionar signifique una alternativa a la situación que viven. A través de la propuesta se fomentan procesos
de capacitación dirigidos a fortalecer emprendimientos sociolaborales propios de las mujeres indígenas
promoviendo su autonomía y cambios en un liderazgo con enfoque de género.
Para ello se busca fortalecer la capacidad técnica de al menos 16 mujeres indígenas de las organizaciones,
que serán seleccionadas entre las socias. Se apoyará el acceso a una formación especializada, tanto en
aspectos vinculados con emprendimientos que buscan además de generar ingresos, promover el rescate de
los saberes ancestrales (artesanías y cerámica), como también en aspectos administrativos, comercialización
y promoción. Desde los socios locales (FAL-MACCO) se dará un seguimiento y acompañamiento al
proceso de formación, siendo finalmente compartidos los conocimientos con las demás miembras de las
asociaciones.
Por otro lado, a través de talleres se fortalecerá la capacidad organizativa de las dos organizaciones de
mujeres indígenas con el objetivo de reforzar su autonomía y liderazgo Para reforzar esa autonomía se
apoyará también la participación en al menos 3 ferias-eventos donde puedan presentar y vender sus
productos y al final se realizará una exposición en el MACCO, con el objetivo de asegurar un espacio de
venta en hoteles locales.