Proyectos de cooperación

Programa de alfabetización, educación y atención psicopedagógica a niños/as y adolescentes dominicanos de ascendencia haitiana, en el barrio la Zurza

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Entidad Local

Pamplona/Iruña

Año

2013

Área geográfica

América del Norte, Central y Caribe

País

Dominicana, Rep.

Sector CRS

11230 - Capacitación básica de adultos

Area sectorial

112 - Educación básica

ODS/ODM

ODM9 - Contribución trasversal

Meta ODS/ODM

Metas no especificadas

Tipo de cooperación

Indirecta

Instrumento

Personal del país donante

Canalización

(Bilateral) ONG del país socio

Entidad canalizadora

CONGREGACIÓN MISIONERAS DOMINICAS DEL ROSARIO

Localización

Barrio de la Zurza está ubicado en la zona norte de Santo Domingo, la capital del país

Contraparte local

Misioneras Dominicas del Rosario. Solher "Solidaridad entre Hermanos"

Fecha inicio

10 de diciembre de 2012

Fecha fin

9 de enero de 2015

Importe total del proyecto

35.000 €

Total comprometido por la Entidad Local

22.050 €

Total desembolsado en el año por la Entidad Local

22.050 €

Cofinanciación

Socios Locales País destinatario

Marcadores

Género Medio ambiente Gobernabilidad Cult. & Indígenas Comercio Migración y desarrollo Salud sexual y reproductiva y salud infantil
No Orientado No Orientado No Orientado No Orientado No Orientado Otros Fines No Orientado

Marcadores de Río

Biodiversidad Cambio climático - Mitigación Cambio climático - Adaptación Desertificación
No Orientado No Orientado No Orientado No Orientado

Descripción resumida

El barrio de la Zurza está ubicado en la zona norte de Santo Domingo, la capital del país. Es un barrio que se estableció cerca del Mercado Central en el año 1960, y está formado principalmente por haitianos que llegan huyendo de la situación de extrema pobreza en la que viven. A esta población se unen personas desempleadas del país, que buscan encontrar medios de vida, donde se realiza el mayor abastecimiento de insumos del país El barrio tiene una población de 90.000 habitantes que año tras aña van llegando del campo a la ciudad para vivir hacinados y sin los mínimos servicios de agua, luz y saneamiento. La atención educativa y sanitaria son muy deficientes ocupando el país lugares muy lejanos en ambos servicios en el ranking internacional según el PENUD. Así mismo las casuchas donde viven las familias ofrecen un aspecto desolador e indigno de la persona humana. Los más perjudicados son los haitianos y dominicanos descendientes de haitianos, a quienes las autoridades no les reconocen los mínimos derechos humanos. Hay niños/as y adolescentes que a pesar de que las leyes del país son favorables hacia estos colectivos, muchos no están registrados oficialmente, por lo que no son reconocidos como personas. Así mismo a los haitianos solo se les ofrece la oportunidad de realizar los peores trabajos, tanto en la ciudad (servicio doméstico; cargadores en el mercado, mano de obra barata en las empresas) como en el campo, principalmente en la recolección de la caña de azúcar donde están en régimen de semi esclavitud. Para atender a los hijos/as de los haitianos y dominicanos descendientes de haitianos, las Misioneras Dominicas nos hemos trazado el siguiente OBJETIVO: ?Propiciar un espacio que permita la integración entre dominicanos y haitianos, y el desarrollo integral de los niños/as y adolescentes dominicanos, haitianos y de ascendencia haitiana, que viven en el barrio de LA ZURZA y sus alrededores, a través del programa de alfabetización y ayuda psicopedagógica, y desde un enfoque de derechos humanos? Y para conseguir este objetivo se han programado las siguientes ACTIVIDADES: Clases de alfabetización y educación de niños/as y adolescentes de lunes a viernes.- Talleres de formación sobre derechos de la infancia.- Participación en actividades lúdicas con otros centros escolares.- Participación en campamentos de verano para que conozcan otras realidades.- Celebración de la fiesta del niño/a y adolescente.- Talleres de formación sistemática para padres, madres y tutores.-Talleres de formación a monitores, maestros y maestras.- Visitas de seguimiento a las familias de niños/as y adolescentes. EL SOCIO LOCAL Las Misioneras Dominicas del Rosario están en el barrio de LA ZURZA desde el año 1998 con la finalidad de conocer la realidad que vivían y viven los haitianos, y trabajar con ellos para salir de esa situación Forman una comunidad de tres hermanas y junto a un grupo de voluntarios formaron un equipo denominado SOLHER (Solidaridad entre hermanos). La vinculación de las hermanas con la gente es total. Su casa es una más del barrio y está abierta para acoger a las personas que llegan a exponer sus necesidades y problemas. En el trato con ellas observamos la necesidad urgente de una formación a todo nivel. Muchas mujeres son analfabetas, mujeres separadas o abandonadas, hombres sin trabajo o explotados en los lugares de trabajo, sin un reconocimiento a sus derechos como trabajadores, enfermos y sin asistencia sanitaria. Desde el grupo realizan los trabajos con niños/as, adolescentes, padres y madres de los mismos, maestros, maestras y monitores y extienden su radio de acción a otros sectores de la población. Desde su llegada han trabajado y conseguido la legalización de un grupo numeroso de niños/as y adolescentes, aunque la oposición de parte de las autoridades es muy grande. Nivelación de 700 niños/as hasta tercer grado de E. Primaria para que puedan pasar a la escuela pública. Ejercicios de lecto-escritura y operaciones matemáticas como iniciación al aprendizaje. Ejercicios de psicomotricidad en niños/as discapacitados. Entrevistas con padres/madrees para evitar y superar el maltrato familiar. Los problemas nos superan, pero estamos al lado de la gente sufriendo con ellos las injusticias e impotencia, y encontrar medios para salir de la situación, ante la indiferencia u oposición de las autoridades. Para nosotras el centro SOLHER es en LA ZURZA como un lugar desde donde brota la esperanza, para salir de la situación de pobreza, al ver que niños/as y adolescentes y sus familias están recibiendo el apoyo necesario para desarrollarse con normalidad.