Proyectos de cooperación

Emergencia en el Sahel, Hambruna en Mali

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Entidad Local

Bilbao

Año

2012

Área geográfica

Africa Subsahariana

País

Malí

Sector CRS

72040 - Ayuda alimentaria de emergencia

Area sectorial

720 - Ayudas de emergencia

ODS/ODM

ODM9 - Contribución trasversal

Meta ODS/ODM

Metas no especificadas

Tipo de cooperación

Indirecta

Instrumento

Contribuciones a programas específicos y fondos gestionados por socios

Canalización

(Multibilateral) Naciones Unidas

Entidad canalizadora

UNICEF Comité Pais Vasco

Localización

Suroeste de Mali

Contraparte local

UNICEF Mali

Fecha inicio

1 de junio de 2012

Fecha fin

30 de noviembre de 2012

Importe total del proyecto

100.000 €

Total comprometido por la Entidad Local

35.000 €

Total desembolsado en el año por la Entidad Local

35.000 €

Marcadores

Género Medio ambiente Gobernabilidad Cult. & Indígenas Comercio Migración y desarrollo Salud sexual y reproductiva y salud infantil
No Orientado No Orientado No Orientado No Orientado No Orientado Otros Fines

Marcadores de Río

Biodiversidad Cambio climático - Mitigación Cambio climático - Adaptación Desertificación
No Orientado No Orientado No Orientado No Orientado

Observaciones

Ayuda Humanitaria de Emergencia

Descripción resumida

Programa de respuesta a la emergencia de la hambruna en Mali basado en 4 etapas: 1)Distribución de los suplementos nutricionales, 2)Distribución de los alimentos terapéuticos listos para su uso (RUTF-RUF-Ready to Use Therapeutic Food), 3)Fortalecimiento de los centros de salud materno-infantil. Los fondos del Ayto.de Bilbao se dedicaron al suministro de: 800 paquetes de sobres de alimentación terapéutico listo para usar-RUTF 5 kits nutricionales para módulos de suministro médicos Distribución y transporte. Los RUFT supone una ventaja en la lucha contra la desnutrición, ya que contiene los 40 micronutrientes necesarios en las primeras etapas del desarrollo del niño. Además la ayuda que se destina de forma habitual (harinas en su mayor parte) han de cocinarse con agua, y este alimento no, por lo que se evita el riesgo de contaminación bacteriana. Otra de las ventajas es que ya no es necesario ingresar a los niños desnutridos, porque, salvo en el caso en el que acuden con una enfermedad añadida, se les puede tratar en casa tras haber permanecido en un centro de estabilización hasta comprobar si reaccionan al tratamiento.